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jueves, 5 de julio de 2012

EURO 2012. Campeones de Europa.


Días antes de la final le oíamos decir: «no me siento determinante, me gustaría tener más incidencia en el juego». No estaba cómodo, su campeonato venía siendo como el de la selección; serio y gris, en ocasiones demasiado gris. Pero Xavi Hernández es un futbolista inigualable, no podía faltar a la cita, la final le esperaba con los brazos abiertos, y no defraudó.

Desde el momento en que Proença dio el pitido inicial su presencia se empezó a notar. En silencio ordenó a sus compañeros, de repente todos se veían, los pases eran precisos, la presión sobre Pirlo era magnífica, tanto, que obligo a De Rossi a retrasar su posición para ayudar a su compañero, lo que provocaba la partición de Italia en dos, la transición defensa-ataque del equipo español era perfecta. Xavi, el gran Xavi Hernández había vuelto, se sentía cómodo, determinante y con una gran incidencia en el juego.

Pero no nos vamos a engañar, Italia ayudó, decidió apelar a su grandeza como tetracampeón del mundo. Renunció a la defensa de 5, renuncio a encerrarse atrás, salió a jugarle a España de tú a tú y lo pagó caro. Gracias a eso la Selección abandonó su juego de posesión y lo cambió por el de posición, juego en el que Xavi es el más grande, todo un maestro.

¿Y porqué hago distinción entre posesión y posición? Son conceptos diferentes que van de la mano. Los equipos que han jugado contra España en éste Europeo se han encerrado a ultranza, convirtiendo el área en una zona acorazada, sin posibilidad de entrar en ella y siempre con uno o dos futbolistas dispuestos a salir corriendo al área española a la menor ocasión. Decía Johan Cruyff: «En el fútbol sólo hay un balón, si lo tengo yo no lo tiene el contrario, y si el contrario no lo tiene, no puede hacerme gol, además trato de llevarlo a campo contrario, lo más lejos de mi portería, así, cuando lo pierda tendré tiempo con presión, de recuperarlo antes». El juego de posesión simplemente consiste en poseer el balón, a veces de forma insulsa, sí, otras no tanto, pero de esta manera, no lo tiene el rival, y le obligo a correr por el campo persiguiéndolo; desgastando y aburriendo al rival, en palabras de Del Bosque: madurando el partido.

Pero volviendo a la final, la valentía de Italia dejaba espacios, y hoy por hoy no hay nadie mejor que España teniendo espacios. En otro tiempo hubiéramos perdido seguro, en otro tiempo. Xavi empezó a mover el balón, Iniesta, Xabi, Silva y Cesc con la ayuda de Alba y Arbeloa por las bandas lo acompañaban y los italianos se sentían incapaces de pararlos. El juego de posición dinamizaba todas las jugadas; el debate del 9, desaparecido y así, un balón en profundidad para Cesc, que progresa como un delantero, pasa atrás y el ariete Silva, de cabeza, abría el marcador.

En el segundo gol el maestro ve a Jordi Alba por dentro, pase en profundidad que supera líneas de presión para dejar solo al lateral, se planta ante Buffon y recordando tiempos de infancia define como delantero. 2-0 eliminatoria encarrilada.

En la segunda parte, dos goles. Torres con otro pase por entro del maestro emula a Jordi Alba y tapando la boca a los críticos marca ante el portero italiano; y la guinda de la final, algo por lo que los torristas admiramos al Niño y peleamos por que tenga un puesto en este equipo. Se marchaba sólo, podía hacer su jugada de recorte y triunfar en la final como pichichi del torneo en solitario, más de uno no lo habría dudado, pero él piensa siempre en lo mejor para el equipo, para el grupo. Tras él venía Mata, que acababa de salir y no había jugado hasta el momento ni un sólo minuto en el torneo, no lo dudó, recortó descolocando al portero y le puso en bandeja el balón a su compañero del Chelsea quien sólo tuvo que empujar el balón a la red. A Mata, que tanto le había ayudado esta temporada en el club londinense, se lo agradecería Torres haciendo que inscribiera su nombre en la lista de goleadores de la final. Torres que había quedado empatado en la lista de goleadores con tres, consigue el pichichi gracias al pase de gol que da a Mata.

domingo, 1 de julio de 2012

EURO 2012. El final del camino.


¡Ya estamos aquí!, éste es el partido de la consagración, sólo con jugarlo entramos en la historia, igualamos con Alemania que jugó las finales de: Eurocopa de Bélgica'72, Mundial de Alemania'74 y Eurocopa de Yugoslavia'76. Gano las dos primeras a la Unión Soviética y a Holanda respectivamente y perdió la tercera contra Checoslovaquia, en la tanda de los penaltis a manos de un tal Panenka gracias al penalti al que da nombre. Confiemos en que la historia no se repita.

Jugar esta final es un poco el final de un camino y el comienzo de otro, ganarla nos haría entrar en el Olimpo de los Dioses por la puerta grande. El camino ha sido intenso, increíble, dar con este grupo de jugadores no es producto de la casualidad, su técnica y su sentido táctico es consecuencia de los muchos profesionales anónimos que a lo largo de la vida futbolística de estos chavales han ido poniendo su dedicación y conocimiento; no en vano, Del Bosque dedico precisamente a ellos el Campeonato del Mundo.

Perder en la final no sería un fracaso, el éxito está garantizado con sólo llegar. Como muy bien dijo Vicente en una entrevista hace poco, hemos pasado rápidamente de pobres a ricos; en tres torneos hemos pasado de ser la eterna promesa que siempre caía en cuartos, cuando no en la fase de grupos, a jugar finales con solvencia y ganarlas.

En unas horas será nuestra tercera final consecutiva, antes Alemania y después Holanda cayeron ante nosotros, la siguiente será Italia. No es cuestión de suerte, ahora, gracias a nuestro estilo sabemos competir, sabemos controlar un partido, con el balón en los pies no tenemos rival y tampoco miedo, somos eficaces en el control del esfuerzo, hemos crecido y estamos a la altura de los mejores.

Italia nos garantiza un partido de alto nivel con todos los ingredientes del fútbol de élite y nosotros estamos sobradamente a su altura. Pero es un partido de fútbol y se puede perder o ganar. La derrota no puede empañar la realidad de lo conseguido; una Eurocopa seguido de un Mundial con un estilo propio, somos una referencia, un modelo a seguir, nuestros rivales nos temen y nos respetan, ocurra lo que ocurra esta noche en el Olímpico de Kiev.

Esta noche, cuando Pedro Proença, arbitro del encuentro, de el pitido inicial empezará la última batalla, la última conquista, lo que nadie hasta ahora ha conseguido, ganar de forma seguida Eurocopa, Mundial, Eurocopa, y el rival no podía ser mejor que la gran Italia, los reyes del otro fútbol, cuatro estrellas en su camiseta la colocan como Tetracampeona Mundial con una Eurocopa en su haber, la del 68, organizada en su país. Todo está en marcha, arriba el telón y a disfrutar.